Acogida a la I.G.P (Indicación Geográfica Protegida) y sumamente conocida y apreciada en toda España, nuestra cecina se elabora con carne escogida de entre las mejores piernas de vacuno para someterse a un proceso de elaboración único en el territorio nacional e internacional.
Con una curación mímina 12 meses. Cada una de las piezas utilizadas en la elaboración de nuestra Cecina de León viene certificada con el distintivo de calidad otorgado, gracias a la aprobación de todos los requisitos exigidos en el Reglamento, por el consejo regulador de la Cecina de León que vela por el cumplimiento de dicho Reglamento garantizando, de esta manera, la calidad absoluta del producto.
Su carne tiene un sabor característico, no es muy salada y es de consistencia poco fibrosa. El efecto que resulta del ahumado aporta en el proceso de maduración un aroma característico y un intenso olor a bosque (ya que, para el ligero ahumado en Entrepeñas se utiliza leña de roble de la zona) apoyando el conjunto de sabores.